Nuevamente Aznar

 

Nuevamente Aznar
   
19/12/2016 .    

Nuevamente José María Aznar ha hablado, y todas las fuerzas político-económicas y medios de comunicación del “stablishment “se le han echado encima.

¿Qué dijo Aznar?

Para mí lo más importante del artículo de FAES, ante las críticas de Soraya a las decisiones y actuaciones del PP contra el Estatuto catalán, es lo siguiente: “De nuevo el PP y sus carencias. Y de nuevo, esa tendencia en el Partido Popular a asumir el relato que hacen de él sus adversarios”.

http://www.fundacionfaes.org/es/prensa/45765/analisis_faespara_firmas-_las_del_tinell


El arrinconamiento de Aznar

Para cualquier analista, con un mínimo de sentido crítico, es algo digno de analizar el arrinconamiento de José María Aznar por parte de los poderes de este país, sobre todo desde 2008, año del giro del PP que se ha ido materializando en mayor grado al cabo de los años. 

No obstante Aznar siempre cayó mal a los poderes facticos, muy cómodos en sus enredos con el PSOE y que siempre han fomentado una derechita sumisa, mediocre y centroide que no contraviniera sus intereses. Aznar pudo tener muchos fallos pero no era un conformista con la situación dada, sino un profundo reformista, eso evidentemente exaspera a aquellos que tienen construido su chiringuito desde la transición y a los que no les importa la situación del país más allá de sus particulares intereses.

Ya escribí en mayo de 2013 sobre esto en este diario, en un artículo denominado “Todos contra Aznar” donde deje escrito lo siguiente:

“Aznar es presidente de honor del Partido Popular, también es presidente de la Fundación FAES, ha sido presidente del Gobierno de España durante dos legislaturas y fue el artífice de la refundación del Partido Popular". "José María Aznar dio a la derecha política española sus primeras victorias electorales indiscutibles desde la Restauración. Su receta no fue especialmente original ni es ningún secreto: construir un gran Partido Popular en el que cupiesen todas las sensibilidades y todos los votos desde el centroizquierda hasta la derecha nacional democrática. La UCD, pese a su variedad, nunca entendió esto: que dejar un espacio social y político libre a su derecha podía ser cómodo para sus líderes, para ahorrarles acusaciones de derechismo, ultraderechismo, y canibalismo a cargo de la izquierda postestalinista, pero era una renuncia completa a la ´mayoría natural´ (y una sumisión moral al socialismo)"…

"…Hay un misterioso anhelo en España por hacer callar a José María Aznar, ETA intentó matarlo antes de ser presidente, el 11 de marzo trataron de matarlo políticamente, últimamente parece que el stablishment lo considera caducado y se ponen de los nervios cada vez que opina".


"Mientras Felipe González se pasea por los foros y platós televisivos como si fuera un gran estadista sin ser cuestionado por nadie e incluso peloteado por parte del centrismo político, José María Aznar, cuyos datos objetivos en su gestión de gobierno son impecables, es cuestionado continuamente…”.


¿Es más peligroso para ellos Aznar que Pablo Iglesias?

¿Es quizás Aznar más peligroso que Pablo Iglesias, para la posibilidad de truncar una hoja de ruta marcada por el PSOE y el nuevo PP que consiste en una reforma de la Constitución basada en los principios del acuerdo del PSOE en Granada, en los dictados editoriales de Juan Luis Cebrián y de una élite financiera-empresarial que pretende fortalecer el sistema y sobre todo fortalecer a los que detentan el poder en España desde hace muchas décadas, por medio de una segunda transición, para que no cambie nada?

Creo que después de la decepción de los partidos emergentes, desde la derecha a la extrema izquierda, la aniquilación de UPyD, y la falta de fuste de los que pretendían ser alternativa, Aznar podría ser la única piedra en el camino de esa segunda transición que pretenden construir el nuevo PP con el PSOE y con la derecha separatista vasca y catalana, sobre las bases diseñadas por el PSOE en Granada con Rubalcaba, las concepciones de cierta derecha en línea con Herrero de Miñón, así como con la complacencia de poderes económicos y financieros internos y políticos externos.

Aznar podría entrar en el juego de una segunda transición perfectamente, pero creo que no entraría en el aro de ciertos aspectos que se barajan que atentan contra la nación española, por eso lo temen.

Quizás el 11-M se hizo para que llegáramos al punto en el que estamos actualmente, quién sabe, y está claro que en ese punto Aznar les sobra.