viernes, 21 de febrero de 2014
Textos de Juan Pablo II "Memoria e Identidad"
"los pueblos, la patria, la nación y “los sistemas políticos” son construcciones de la historia del hombre. Su cultura, sus tradiciones, la forma en que -con el transcurrir de los siglos- se unificaron territorios, la búsqueda de las semejanzas en vez de las diferencias, la creación o el descubrimiento del lazo más puro y fuerte que tenemos como sociedades: la identidad. Somos lo que somos por nuestro pasado. Es imposible que un pueblo avance y entienda sus realidades si no comprende su pasado. Es absurdo asumir el futuro sin aprender y valorar la historia pasada."
«La patria es un bien común de todos los ciudadanos y, como tal, también un gran deber. (...)
El siglo XX, ¿no manifiesta acaso una tendencia generalizada al incremento de estructuras supranacionales e incluso al cosmopolitismo? Esta tendencia, ¿no comporta también que las naciones pequeñas deberían dejarse absorber por estructuras políticas más grandes para poder sobrevivir? Se trata de cuestiones legítimas. Sin embargo, parece que, como sucede con la familia, también la nación y la patria siguen siendo realidades insustituibles. (...)
Naturalmente, se debe evitar absolutamente un peligro: que la función insustituible de la nación degenere en el nacionalismo.En este aspecto, el siglo XX nos ha proporcionado experiencias sumamente instructivas, haciéndonos ver también sus dramáticas consecuencias. ¿Cómo se puede evitar este riesgo? Pienso que un modo apropiado es el patriotismo. En efecto, el nacionalismo se caracteriza porque reconoce y pretende únicamente el bien de su propia nación, sin contar con los derechos de las demás.Por el contrario, el patriotismo, en cuanto amor por la patria, reconoce a todas las otras naciones los mismos derechos que reclama para la propia»
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario